La ruta de la soja navideña 

fuente La Vanguardia Andy Robinson 24/12/2020

Los pavos y los embutidos de Navidad proceden de carne de animales engordados con el grano de áreas deforestadas de la Amazonia.

La terminal de soja del exportador multinacional estadounidense Cargill, cuyos beneficios anuales superan los 3.000 millones de dólares, está en Porto Velho, en la Amazonia brasileña.

La soja es cargada en embarcaciones de 50.000 toneladas para ser trasportada en viajes transatlánticos de 12 días de duración hasta los puertos de Liverpool y Barcelona, donde se encuentran las dos plantas de procesamiento de Cargill en Europa. Al llegar el grano será triturado y transformado en piensos de animales, principalmente aves y cerdos. Es decir que las tradicionales comilonas navideñas -el pavo, el pato ya de moda, o la longaniza de aperitivo- no serían iguales sin la odisea de 12.000 kilómetros de la soja brasileña.

Y, de allí, el primer problema para quienes piensan incluir en su lista de deseos para el nuevo año el futuro feliz para el planeta. El área de cultivos de soja se ha multiplicado por cuatro en la Amazonia brasileña

Mato Grosso, la principal región brasileña de producción sojera, se sitúa en la frontera de la deforestación amazónica. La Amazonia se deforesta y se quema para allanar el camino al ganado y, después de un tiempo, se siembra soja. Luego, los ganaderos deforestan otras áreas para los millones de cabezas de bueyes cebú y el proceso se repite.

Dada la importancia crítica de la Amazonia como sumidero de C02 y repositorio del 20% del agua dulce del planeta, habrá motivos para reflexionar después de los festines de la navidad europea. Pese a ser considerada líder en la prevención del cambio climático, la UE importa más soja de zonas recientemente deforestadas en Brasil que ninguna otra región del mundo.

En España, el momento de reflexión puede llegar con los aperitivos de salchichón, fuet y chorizo. Tercer país productor de carne de cerdo del mundo y número uno en Europa, España importó 2,4 millones toneladas de soja brasileña en el 2019 . Cataluña es el principal productor, responsable, junto con Aragón, del 50% de los casi 32 millones de cerdos criados en España , la mayoría de ellos hacinados en granjas industriales donde el pienso a base de soja brasileña es la única distracción en un infierno diario sin luz ni aire.

Más de 100 ONGs lanzan la campaña No te comas el bosque para evitar la deforestación importada en la UE

La deforestación del Amazonas alcanza niveles históricos debido al consumo de carne

REVISTA NAT GEO   Fuente National Geographic Cristina Crespo Garay  24 jun. 2020

La deforestación, la destrucción de hábitats y la intensificación insostenible de la producción animal son algunas de las principales causas de la aparición de enfermedades zoonóticas como la covid-19.

Los últimos cincuenta años han supuesto un coste de deforestación nunca antes visto en la historia de la humanidad, arrasando un 15% de la superficie mundial de vegetación equivalente al territorio de España, Portugal y Francia.

La causa principal de este continuo aumento de la explotación de los bosques radica en el incremento del consumo de carne y la consecuente expansión de la ganadería extensiva, así como el cultivo de soja y la creación de pastos para la ganadería. Tan sólo Brasil, país que alberga la mayor parte de la selva amazónica, ha transferido más de 60 millones de animales a esta región.

La dieta humana es la clave de la deforestación. La expansión de la ganadería y del cultivo de soja se debe a la demanda internacional de carne y piensos que la industria necesita para alimentar los animales que forman parte de la alimentación humana.

“El 70% de las enfermedades humanas son producidas por la destrucción de la naturaleza” WWF

“Nuevas enfermedades zoonóticas están surgiendo a un ritmo alarmante, impulsadas por la ruptura del vínculo entre los seres humanos y la naturaleza” WWF

También las empresas eléctricas y el mercado de madera tropical hacen negocio de la destrucción de la selva. España es uno de los mayores importadores de madera tropical amazónica, “contribuyendo no solo a la destrucción de la Amazonia sino también a la invasión de territorios indígenas o el trabajo esclavo” –fuente Greenpeace

Una deforestación superior a un 20% significará un punto de no retorno para el medio ambiente, el cambio climático y la extinción masiva de especies.

Matar un elefante en Botsuana, a partir de 30.000 euros ElMundo

WWF (World Wildlife Fund), una de las ONGs más influyentes, tuvo al ex Rey de España como presidente honorífico desde sus inicios.

Un cazador, por muy rey que sea, como figura honorífica de una organización que se dedica a proteger al medio ambiente es cuando menos desconcertante, si no grotesco.

WWF conocía de sobra la crueldad del personaje. Aficionado a las corridas de toros y a masacrar animales, en una cacería en Rusia, asesinó a un oso de dos años, simpático y alegre querido por la gente del lugar y al que llamaban Mitrofán. Para evitar percances al valeroso rey, emborracharon al pobre animal antes de la cacería.

WWF quedó en evidencia después del asesinato del elefante por el energúmeno emérito al argumentar que la caza está regulada en Botsuana y que allí los elefantes no están en peligro de extinción.

WWF que se define como una organización conservacionista no se opone a la caza como un método eficaz para el control de especies.


foto entrada: The New York Times Your Questions About Food and Climate Change